Mundial Inglaterra 1966. ‘No la metimos’

Disparos de Cisneros y Borja se estrellaron en el poste ante Uruguay, lo que impidió que México avanzara a la segunda ronda por primera vez en su historia.

“Javier Fragoso abrió el juego con Aarón Padilla, este desbordó por la banda izquierda y sacó un centro. Corrí hacia primer poste para buscar el balón y rematé de primera intención con la zurda, pero el balón rebotó y se quedó girando, entonces me quedó y de media vuelta volví a conectar con la izquierda. Entró pegado al poste derecho (de Marcel Aubour)”. De esta forma, Enrique Borja recordó el gol con el que debutó en la Selección Nacional durante un Mundial, el cual, pese haber sido el de la ventaja, sólo sirvió para empatar a uno con Francia en el debut de ambos en Inglaterra 1966.


El 11 de Junio de ese año, un mes antes de que iniciara la Copa del Mundo en Inglaterra, Ignacio Trelles, el entonces director técnico de El Tri, dio a conocer la lista final de los 22 hombres que representarían al combinado durante dicha justa, pero un hombre saltó a la vista de todos, por tratarse de un novato. Este jugador fue Borja, quien con sólo dos temporadas en el profesionalismo, había sido convocado por primera vez a la Selección con la que sumaba cinco partidos amistosos y un gol.

Con dicha novedad, la Selección Mexicana arribó a Londres como víctima del grupo, ya que las apuestas estaban 200 a uno en contra, mientras que la prensa internacional no les concedía oportunidad alguna frente a sus rivales.

No obstante, la Selección contaba, a decir de Borja, “con una mezcla de experiencia con juventud”, en la que sobresalían Antonio Carbajal, Salvador Reyes, Jesús del Muro, Gustavo Peña, Isidoro Díaz, Aarón Padilla, Guillermo Hernández, Arturo Chaires, José Luis González, Elías Muñoz y Javier Fragoso. Esa confianza aumentó cuando conocieron el empate a cero entre los anfitriones y los sudamericanos durante el partido inaugural del 11 de Julio. “Habíamos visto el empate a cero de Inglaterra con Uruguay, entonces pensamos que era una buena oportunidad de ponernos arriba en el grupo con dos puntos sí ganábamos”, señaló quien se enteró que alinearía un día antes del primer partido, en el que marcaría el único gol mexicano durante la justa británica.

El 13 de Julio, México debutó ante Francia. Nacho Trelles paró al equipo nacional con una 4 – 3 – 3, formación en la que destacó el novato delantero universitario, quien se mostró combativo y dispuesto a hacer daño a la defensa gala. Y ello se dio a los 15 minutos, cuando anotó un gol, pero el árbitro israelí Menachem Ashenazi lo invalidó por determinar que estaba en fuera de lugar.

“Estaba en línea con dos de los defensores de Francia, pero marcó off side”, señaló el atacante de entonces 20 años, quien minutos después, al 48’, marcaría el primer gol anotado en Wembley durante el Mundial y quien tras el empate de los europeos, pudo poner de nueva cuenta al frente a México con un cabezazo a centro de Isidoro Díaz, pero el balón pasó ligeramente desviado de la cabaña.

El empate fue marcado por Gerald Hausser, quien tras robarle el balón a Chaires en tres cuartos, sacó un disparo que batió a Ignacio Calderón, por quien se había decantado el entrenador en lugar de Carbajal.

Díaz y Padilla fueron los hombres más desequilibrantes para México. Pese a ello, Broja recibió los elogios: “Fue su primer partido internacional y lo hizo muy bien”, mencionó Trelles. En tanto L’ Equipe mencionó: “Enrique Borja es un gran descubrimiento del futbol mexicano. Tiene un gran porvenir si continúa una carrera. Aspira a tener un cargo diplomático una vez que se gradúe, pues habla inglés e italiano”. Tras el encuentro, el muchacho fue felicitado por los uruguayos, quienes habían sido testigos del partido.

Así llegó el 16 de Julio, día del segundo partido frente a los anfitriones. Sin embargo, dada la alineación puesta por Trelles, México renunció desde el principio al ataque al meter a dos hombres de marca en medio campo junto a Días y Reyes, dejando sólo a Borja en el ataque.

“La prensa criticó a Don Nacho porque formó la ‘alineación del miedo’”, recordó Del Muro. De tal suerte, México logró contener los embates ingleses hasta que al minuto 37 apareció el hombre a temer: “Sir Bobby Charlton condujo el balón desde mediocampo y le pegó un zapatazo a la pelota que se metió en el ángulo (derecho)”, atestiguó Borja. Después, a 15 minutos del final, El Cuate soltó un disparo de Jimmy Graves y Roger Hunt sólo empujó.

Tras el partido, el propio entrenador admitió su error: “Buscamos el empate defendiéndonos, pero no lo hicimos bien ni lo bastante rápido”. Por su parte Carbajal afirmó: “En el ánimo del grupo permanecía el fantasma del 8 – 0 que nos metió Inglaterra en 1961”.

Así llegó el 19 de Julio, fecha del último partido de grupo frente a los charrúas, a quienes los aztecas estaban seguros de vencer, pese a la derrota sufrida, resultado que los clasificaría, razón por la que pidieron cancelar los boletos de regreso a México programados para el día siguiente. La principal novedad del equipo fue La Tota, quien con ese partido se convirtió en el único futbolista en jugar Cinco Copas del Mundo.

Carbajal se retiró en Londres, lugar dónde empezó su carrera durante los Juegos Olímpicos de 1948, ya que a su regreso se hizo profesional con el España, club en el que permaneció dos años. “En Londres empecé y ahí quise terminar mi carrera”.

Según la prensa internacional, México “dio su mejor partido en Europa”, pero no pudo conseguir el gol y el partido concluyó empatado a cero, con lo que los uruguayos clasificaron con cuatro puntos.

Acerca de ese partido, Isidoro Díaz comentó: “El desempeño fue bueno. Hubo tiros de Cisneros y de Borja que, de no haberse estrellado en los postes, habrían cambiado el panorama de nuestro equipo”. Y el novato, convertido ya en ídolo, coincidió con ello: “O la pelota pegó en el poste o por alguna razón no la metimos”.

En el hotel Carbajal tenía preparado un cocktail para despedirse del futbol ante sus compañeros, directivos y periodistas. Entregó su suéter a Guillermo Cañedo pronunciando frases emotivas, pero mayor sentimiento tuvieron las palabras de su colega de posición, Ignacio Calderón anunció también el fin de su carrera futbolística, hecho que le había prometido a su padre para así concluir su carrera de odontólogo y dedicarse de lleno a ello. No obstante, tiempo después, el Cuate continuó con su carrera.  



Fuente: Por Diego Hernández en Récord. Ediciones Especiales. Todo sobre Sudáfrica 2010, p. 74 – 76.








No hay comentarios.:

Publicar un comentario

La recomendación del momento

Armida de la Vara – Estampa de otoño

Por toda la casa se esparce un olor agridulce a membrillo, a orejones de calabacita y pera, a pasta de higo y a ejotes pasados por agua que,...

Lo más popular de la semana