Después de dos fases, hasta cierto punto sencillas, el combinado de Ignacio Trelles encontró algunos escollos, como aquella serie ante Estados Unidos en la que el entrenador Johnny Smith dijo, tras el primer juego: “nadie puede negar que les dimos el susto de su vida”.
En la segunda fase, Costa Rica tiró un primer golpe en el juego de Ida; sin embargo, ya en México, el cuadro de Trelles los goleó y humilló, al grado de que la mayoría de los ticos derramaron lágrimas en el vestidor.