Con todos los factores en contra se presentó la Selección Mexicana en Suiza y aún así le plantó cara a Francia antes de ser acuchillados por el árbitro español Asensi.
La suerte le volteó la cara a la Selección Mexicana, incluso antes de que el Mundial de Suiza 1954 arrancara. La devaluación del peso an Abril de ese año, de 8.64 pesos a los 12.50 por dólar estadounidense, obligó a enviar una escuadra de solamente 19 mexicanos en lugar de los 22 registrados ante la FIFA.