¿Verdad, mentira o error de apreciación?
En las quietas y oscuras aguas del lago Ness, en Escocia, habita un monstruo de leyenda. Fue visto por primera vez en el año 565 por San Columba, quien, al ver salir del agua el largo cuello de la bestia lanzando una especie de rugido, le pidió que se marchara. El monstruo obedeció. Desde entonces, muchas personas han afirmado que lo vieron, pero los testimonios y otras pruebas, como vídeos y fotografías, no son concluyentes. “Nessie” – así le dicen de cariño – es tan escurridizo como una anguila gigante. Los especialistas lo consideran un plesiosaurio, un dinosaurio que sobrevivió a la extinción de esta especie. Lo que no se explican es cómo sigue viviendo, pues por su tamaño necesita mucho más alimento que el que le puede brindar el lago donde habita. Nessie seguirá siendo un misterio, y sólo nos queda verlo en fotografías, como la histórica de 1933, que le tomó el doctor inglés R. K. Wilson durante sus vacaciones por Escocia.
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