Una vez le correspondió a un asno cargar una imagen de un dios por las calles de una ciudad para ser llevada a un templo. Y por donde él pasaba, la multitud se postraba ante la imagen.
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Esopo – El asno que cargaba una imagen
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Esopo – El adivino
Instalado en la plaza pública, un adivino se entregaba a su oficio.
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Esopo – Dos hombres disputando acerca de los dioses
Se encontraban disputando dos hombres sobre cuál de los dioses, Hércules o Teseo era el más grande.
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Esopo-Bóreas y el Sol
Bóreas y el Sol disputaban sobre sus poderes, y decidieron conceder la palma al que despojara a un viajero de sus vestidos.
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Esopo – Afrodita y la gata
Se había enamorado una gata de un hermoso joven, y rogó a Afrodita que la hiciera mujer. La diosa, compadecida de su deseo, la transformó en una bella doncella, y entonces el joven, prendado de ella, la invitó a su casa.
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