¡Qué contento estoy!
Mi tío me pidió que lo ayudara.
Desde temprano fuimos al huerto.
¡Qué contento estoy!
Mi tío me pidió que lo ayudara.
Desde temprano fuimos al huerto.
Por toda la casa se esparce un olor agridulce a membrillo, a orejones de calabacita y pera, a pasta de higo y a ejotes pasados por agua que,...