Antes del primer encuentro eliminatorio ante Cuba existían temores y dudas en el medio futbolístico nacional. Cabe mencionar que México no era el favorito en la serie, pues los caribeños habían conquistado la Medalla de Oro en los Juegos Centroamericanos de 1930. De la misma manera, se rumoraba que contaban con extranjeros naturalizados en sus filas.
Sin embargo, en la cancha los mexicanos les dieron una tremenda lección a los isleños en los tres partidos disputados, todos extrañamente en México lo que arrojó elogios para el técnico, Garza Gutiérrez.