El ser humano, desde la antigüedad, ha padecido enfermedades debido a muchos factores, entre ellos, la falta de higiene, la propagación de bacterias, los virus, una alimentación inadecuada, etc.
Remontándonos a la historia de cómo fue posible que el hombre haya podido descubrir organismos muy pequeños que se encontraban en el aire, la comida, en el mismo cuerpo, en las manos, etc.
Anton van Leeuwenhoek, comerciante holandés, realizaba como actividad extra, pulir lentes. En 1683 escribió una carta donde describía que había examinado una gota de agua mezclada con residuos de alimento y observó con gran sorpresa que en aquella mezcla había una gran cantidad de animalitos vivientes. En otra ocasión observó que al arrojarles agua caliente a los residuos del alimento mataba a dichos organismos. Estos organismo llamados microbios parecían misteriosos ante los ojos de los científicos quienes se preguntaban de dónde salían.
Luis Pasteur, químico y biológo francés, creador de la microbiología, autor de las investigaciones sobre las fermentaciones y la profilaxis de la rabia. Sus descubrimientos iniciaron la aparición de las vacunas, él llegó a la conclusión de que los microbios pueden causar enfermedades.
En 1876 Robert Koch, médico alemán, descubrió el bacilo de la tuberculosis; también demostró que el ántrax, enfermedad común entre el ganado, era ocasionado por unas bacterias.
Aunque los microbios de muchas enfermedades infecciosas existen actualmente, se ha demostrado que un pequeño contacto con la enfermedad es una ventaja en cierto modo. El éxito en disminuir la propagación de las enfermedades entre los niños ha modificado algunas de las llamadas enfermedades de la infancia. Las enfermedades de los niños no existen, ninguna infección es característica de la niñez. Este concepto se aplicó a algunas enfermedades que contraían casi todos los niños y adquirían una inmunidad para toda la vida.
Es importante resaltar que entre los cinco y quince años pasan por una etapa de resistencia de las enfermedades llamada edad de oro de las resistencias. Por ejemplo, la rubeola es una enfermedad de la niñez que ataca a los adultos, particularmente peligrosa para una mujer embarazada ya que el virus puede dañar al feto durante los primeros meses de gestación.
La poliomielitis es causada por un virus que se propaga por el agua contaminada; paraliza no sólo los brazos y piernas, sino también el sistema respiratorio y el cuerpo entero, fue hasta 1950 cuando se pudo controlar esta enfermedad por medio de vacunas.
La salud y la enfermedad en los niños cambian de acuerdo a las variaciones del ambiente. Se ha observado que prevalecen algunas enfermedades más en los niños que en los adultos. Algunas enfermedades de los niños son: las infecciones intestinales y de las vías respiratorias; esto se debe principalmente a la falta de higiene, de malas condiciones de la vivienda, alimentación inadecuada y falta de vacunación. Las enfermedades gastrointestinales son las que más daño provocan a los niños e incluso la muerte, provocadas por bacterias y virus que se alojan en el intestino grueso.
La disentería es causada por un bacilo que ataca a los niños desnutridos y que viven en condiciones poco higiénicas. Esta enfermedad llega al niño a través de alimentos contaminados o por falta de lavado de las manos después de ir al baño a defecar.
Los bebés que no toman leche materna tienden a enfermarse con más frecuencia debido a la preparación de la leche sin higiene, utensilios sin hervir y manos sucias de quien prepara los alimentos.
Los síntomas de las enfermedades gastrointestinales dependen del microbio que las cause. Si la causa es un virus, existe fiebre, vómito y diarrea. Si la causa es una bacteria existen los mismos síntomas, pero además, también, falta de apetito.
Los niños afectados por amibas tienen dolor intestinal, los microbios penetran por la boca, se multiplican y causan inflamación, hemorragia y descamación. Las amibas producen unas sustancias tóxicas que aumentan el movimiento de los intestinos, provocando la no absorción intestinal de líquidos, ocasionando la diarrea, que puede provocar en el organismo una deshidratación y poner en peligro la vida de la persona.
Una persona en poco tiempo puede deshidratarse, para ello existe un tratamiento que repone todos los líquidos perdidos por medio de una mezcla de azúcar, sal y agua hervida, esta solución debe protegerse del polvo y tomarse constantemente en pequeñas dosis.
Las enfermedades de las vías respiratorias más comunes son el resfriado común, la laringotraqueobronquitis, la faringoamigdalitis, la adenoides y la otitis.
El resfriado común o catarro es el más frecuente, El causante de esta enfermedad es un virus, que tiene más de 100 tipos diferentes. Se transmite por contagio directo, o en forma indirecta. Se manifiesta por secreción nasal, estornudos, dolor de cabeza, y malestar general. Para lograr una recuperación, es necesario reposo, tomar muchos líquidos y no exponerse a las corrientes de aire.
La laringotraqueobronquitis es una enfermedad que ataca a la laringe, la tráquea y los bronquios; es causada por un virus. Sus síntomas iniciales son como los de un resfriado común. Después de 48 horas inicia tos seca, imposibilidad para hablar y dificultad para respirar. Un médico debe dar las indicaciones necesarias para su tratamiento.
La faringoagmidalitis es originada por estreptocos, y los síntomas son fiebres de 40°, dolor de cabeza y estómago, vómitos, dolores musculares y malestar general. El tratamiento lo indicará un médico.
La otitis es causada por el estreptococo y el neumococo; por lo regular se presenta después de padecer una infección de la garganta. El tratamiento es a base de antibióticos, que el médico señalará adecuadamente.
Algunas medidas de prevención de enfermedades respiratorias son:
· Ventilación, iluminación y limpieza de la casa.
· Alimentación adecuada (equilibrada).
· Cubrirse la boca al estornudar y al toser.
· Evitar lugares contaminados por humo.
· Evitar las multitudes en lugares públicos cerrados.
Para evitar algunas enfermedades transmisibles, es necesario inmunizar con la vacunación, que consiste en proteger al organismo de dichas enfermedades. El organismo puede inmunizarse de forma natural y artificial. Es natural cuando padece una enfermedad infecciosa y artificial cuando se le aplica una vacuna.
En México existen campañas de vacunación permanentes para poder erradicar las enfermedades que pueden llegar a convertirse en epidemias de la población.
Algunas de las enfermedades controladas por las vacunas son las siguientes:
· Poliomielitis. Enfermedad infecciosa originada por un virus que se aloja en el tracto digestivo. Se transmite por contacto directo: la boca y la nariz son las puertas de entrada del virus.
· La tuberculosis. Enfermedad infecciosa y contagiosa causada por las bacterias. La forma de contraerla es por tomar leche contaminada por vacas enfermas o por las vías respiratorias. Es una enfermedad a nivel mundial, en los países desarrollados se ha logrado controlarla debido a la buena alimentación de sus pobladores, así como a las condiciones óptimas de higiene. En nuestro país la tuberculosis se considera un problema de salud pública, ya que los niños que se encuentran en un medio familiar que puede estar infectado, pueden contagiarse fácilmente.
Algunas enfermedades que padecen los seres humanos en el mundo son:
1. La malaria, la produce el protozoo, el hombre es el depósito y el mosquito Anopheles el portador o transmisor de la enfermedad. Ambos juegan un papel importante en el ciclo de la vida del parásito. Habiéndose reproducido sexualmente en el mosquito, el protozoario experimenta diferentes fases de multiplicación; dentro del huésped humano, primero en el hígado y luego en los glóbulos rojos. Estos estallan a medida que el parásito prolifera, originando fiebres altas, terminando con mucho sudor. Posiblemente la malaria o paludismo sea la enfermedad más difundida en el mundo, afectando no sólo a la humanidad, sino también a monos, roedores, pájaros y reptiles.
2. La tripanosomiasis africana. O enfermedad del sueño. Es endémica entre seres humanos y animales domésticos. Se presenta en las zonas calidad, cubiertos de árboles y habitadas por la mosca tse-tsé que vive en la sombra, la cual sirve de vector o la enfermedad. Esta enfermedad mata a cientos de hombres cada año y deja mal a otros miles. Inicia con escalofríos, fiebres y vómitos, después ataca al sistema nervioso central provocando sueño y finalmente la muerte. Esta enfermedad, como la malaria, puede transmitirse de hombre a hombre por medio de su insecto vector.
3. La peste bubónica. Hace tiempo era la enfermedad más temida del mundo; se transmite por la picadura de la pulga de la rata común, pero realmente quien la transmite es un bacilo, que una vez en el flujo sanguíneo, circula por todo el cuerpo originando hemorragias internas, delirio, dolor de cabeza, hinchazón de ganglios linfáticos y fiebres altas. Mueren alrededor de la mitad de los casos que no se tratan.
Actualmente el ser humano ha tratado de controlar, e incluso erradicar algunas enfermedades. Los médicos buscan diversas formas para poder hacer frente a las enfermedades, algunas de ellas nuevas por su aparición, como el SIDA, que surge como epidemia en 1981. Sin embargo, los primeros casos de SIDA, constatados en África y Europa, datan de 1959. Una característica del SIDA es la irrefrenable destrucción de linfocitos (glóbulos blancos de la sangre, que asegura la defensa contra los microbios). Cada milímetro cúbico de sangre tiene 7000. El descubridor del SIDA fue Luc Montagnier.
Fuente: Ciencias Naturales 6, Editorial Progreso.
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