A ritmo de
catenaccio.
Paolo Rossi fue la figura en España 1982, donde fue el campeón de goleo y además se le reconoció como el mejor jugador.
AI Mundial de España 1982 se le denominó como la Fiesta y recibió a 24 invitados, cada uno con un estilo de juego, pero terminó por imponerse el infalible Catenaccio.