Estos recursos deben de tener las siguientes características para garantizar su funcionamiento y el nivel técnico con el que se desarrollan:
● Accesible: Se debe garantizar que el recurso pueda ser utilizado o visualizado por la mayor cantidad de personas, incluyendo aquellas con discapacidad o sin experiencia con otros recursos tecnológicos.
● Adaptable: Debe ser poder actualizado, modificado o personalizado según las necesidades del usuario.
● Duradero: Necesita utilizar tecnologías reconocidas para garantizar su vigencia y validez en el tiempo.
● Flexible: Debe ser de fácil adaptación a diferentes entornos virtuales.
● Interoperable: Necesita adaptarse a distintas interfases para que funcionen diversos entornos digitales sin restricción de acceso o de implementación.
● Modular: Implica que los elementos que lo integran puedan ser separados o identificados fácilmente.
● Portable: Debe de contar con características de diseño y de desarrollo para que pueda ser utilizado desde cualquier plataforma y medio digital.
● Usable: Requiere de una selección acertada de medios para que el usuario tenga una experiencia interactiva, fácil, rápida y cómoda.
Formatos
de información digital.
● Textuales: Información escrita que se representa en esquemas, diagramas, gráficos o tablas.
● Visuales: Son elementos de información representados en imágenes, fotografías, gráficas, ilustraciones y capturas ópticas.
● Sonoros: Son secuencias de información acústica como los podcasts.
● Audiovisuales: Son elementos de información que integran secuencias sonoras, textuales y visuales como vídeos.
● Multimedia: Están integrados por múltiples formatos digitales. Tienen un gran potencial porque ofrecen un porcentaje alto de interacción. En esta categoría se encuentran los videojuegos, simulaciones y realidad aumentada.
Los recursos digitales se clasifican según los medios para los cuáles fueran creados:
● Transmisivos: Son los recursos que apoyan el envío de mensajes a los destinatarios, por ejemplo, el uso del mail y del chat.
● Activos: Permiten que el usuario aprenda acerca del objeto de estudio a partir de la reflexión y la experiencia. Por ejemplo: vídeos, audios y lecturas.
● Interactivos: Permiten que el aprendizaje se logre mediante la interacción del diálogo constructivo, sincrónico o asincrónico entre los usuarios. Por ejemplo: videojuegos, juegos de destreza y simuladores.
Selecciona los recursos digitales educativos en función de lo que quieres comunicar, las necesidades del curso y las características del usuario al que va dirigido.
Fuente:
Fundación Carlos Slim – Administrador de plataformas digitales de aprendizaje.
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