Beneficios
de un análisis de costo-beneficio.
Un análisis de costo-beneficio puede minimizar los riesgos y maximizar las ganancias para proyectos y organizaciones. Puede ayudarte a comunicarte claramente con los interesados y los ejecutivos y mantener tu proyecto en marcha. Debido a que este tipo de análisis utiliza datos objetivos, puede ayudar a reducir los sesgos y evitar que el interés propio de los interesados influya en las decisiones.
Comparar los beneficios de un proyecto con sus costos puede ayudarte a presentar un caso comercial sólido para los interesados y el liderazgo, y garantizar que tu organización persiga los proyectos más rentables o útiles. Las organizaciones utilizan análisis de costo-beneficio para reducir el desperdicio e invertir sus recursos de manera responsable.
Preguntas
orientadoras para un análisis de costo-beneficio.
Cuando persigues un proyecto, los beneficios deben superar los costos. Es importante que tú y tus interesados consideren preguntas como las que siguen desde el principio, mientras preparas la propuesta.
Para determinar los beneficios de un proyecto, puedes preguntar:
● ¿Qué valor creará este proyecto?
● ¿Cuánto dinero podría ahorrar este proyecto a nuestra organización?
● ¿Cuánto dinero aportará de los clientes existentes?
● ¿Cuánto tiempo ahorrará?
● ¿Cómo mejorará la experiencia del cliente?
Y para determinar los costos de un proyecto, considere preguntas como:
● ¿Cuánto tiempo tendrán que dedicar las personas a este proyecto?
● ¿Cuáles son los costos únicos?
● ¿Existen costos continuos?
● ¿Qué
pasa con los costos a largo plazo?
También puedes considerar preguntas sobre beneficios intangibles. Se trata de ganancias que no son cuantificables, como por ejemplo:
● Satisfacción del cliente ¿El proyecto aumentará la retención de clientes y hará que gasten más en los productos o servicios de la empresa?
● Satisfacción del empleado ¿Es probable que el proyecto mejore la moral de los empleados y reduzca la rotación?
● Productividad del empleado ¿Reducirá el proyecto las horas extraordinarias de los empleados, ahorrándole dinero a la empresa?
● Percepción de la marca ¿Es probable que el proyecto mejore la percepción y el reconocimiento de la marca de la empresa, atrayendo a más clientes o proporcionando una ventaja competitiva?
También puedes cambiar estas preguntas para considerar los costos intangibles. Estos son costos que no son cuantificables. Por ejemplo, ¿podría el proyecto poner en riesgo la retención de clientes, la satisfacción de los empleados o la percepción de la marca?
Al asignar valores a los costos y beneficios tangibles o intangibles, puedes hacer referencia a proyectos anteriores similares, realizar investigaciones de la industria o consultar con expertos.
Calcular
costos y beneficios.
El proceso de cálculo de costos y beneficios también se denomina cálculo de retorno de la inversión o ROI. Hay muchas formas de determinar el ROI de un proyecto, pero la forma más sencilla es comparar los costos iniciales y continuos con sus beneficios a lo largo del tiempo.
Una fórmula común de ROI es:
(G-C) / C = ROI
En esta fórmula, G representa las ganancias financieras que esperas del proyecto y C representa los costos iniciales y continuos de tu inversión en el proyecto.
Realizar
un análisis de costo-beneficio puede ayudarte a ti y a tus interesados a
determinar si tiene sentido emprender un nuevo proyecto al evaluar si sus
beneficios superan a sus costos. Al realizar análisis de costo-beneficio para
tus posibles proyectos, puedes utilizar las preguntas de orientación y la
fórmula de ROI como referencia.
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