1) Premonopolista o de Libre Competencia.
Del Siglo XVI al último tercio del Siglo XIX. La competencia se basaba en el costo de los productos y la calidad de los mismos. En este período predominan las sociedades anónimas como forma de organización capitalista. Debido a la competencia, el capital se concentra en pocas manos, lo que provocó la absorción de empresas pequeñas a manos de grandes corporaciones.
2) Imperialista o Monopolista.
Abarca el último tercio del siglo XIX hasta inicio de los años 80.
· La concentración de la producción y del capital ha sido tan elevada que ha creado monopolios incluso internacionales.
· La fusión del capital bancario con el industrial dio lugar a la oligarquía financiera.
3) Globalización.
Comprende de la década de los 80’s hasta nuestros días. Es un proceso altamente dinámico y complejo, que no solo tiene alcances económicos, sino que involucra factores políticos, sociales y culturales. Esta fase histórica del capitalismo implica a su vez la mundialización de la Economía, donde la reproducción del capital y la expansión de la industria son vertiginosas y apuntan a la apertura comercial para hacer circular mercancías provenientes de todas partes del mundo.
En la globalización se han creado innovaciones tecnológicas principalmente en la microelectrónica, telecomunicaciones y robótica. El Estado – Nación está en crisis debido a que muchas veces privilegia los intereses de las grandes empresas trasnacionales sobre los de la población.
Fuente: Vive la Economía 1 (Progreso Editorial).
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