En un medio cambiante como la selva baja, un gran número de seres vivos, desde las bacterias hasta los grandes mamíferos, tienen su hogar bajo tierra, entre las hojas caídas que cubren el suelo, en los arbustos, bajo la corteza de los árboles, en los huecos de los troncos, entre las raíces y en las más altas copas de los árboles. Los tlacuaches, los cacomixtles, los tepezcuintles, forman una guarida apropiada con elementos obtenidos de la selva, donde tienen a sus crías y se ocultan de sus depredadores. Las aves no se limitan a ocupar los arbustos y árboles, sino que también llenan todos los huecos que dejan los otros vertebrados en el suelo, constituyendo una especie de lazo de unión entre los moderadores de los estratos de la selva. Muchas aves vigilan desde las alturas el suelo en busca de su presa, ya sean larvas, insectos, anfibios o reptiles. Con la primavera, muchas especies de árboles se cubren de vistosas flores y pálidas hojas. Para la mayoría de los pequeños habitan