1. No supongas.
No des nada por supuesto. Si tienes duda aclárala. Si sospecha, pregunta. Suponer te hace inventar historias increíbles que solo envenenan tu alma y que no tienen fundamento.
Brotan las flores, están frescas, medran, abren su corola. De tu interior salen las flores del canto: tú, oh poeta, las derramas sobre...