Eran las diez de la mañana.
La Plaza de la Constitución
estaba adornada.
Muchos niños, formados en
filas, esperábamos ansiosos.
Nos repartieron banderitas tricolores.
Eran las diez de la mañana.
La Plaza de la Constitución
estaba adornada.
Muchos niños, formados en
filas, esperábamos ansiosos.
Nos repartieron banderitas tricolores.
Brotan las flores, están frescas, medran, abren su corola. De tu interior salen las flores del canto: tú, oh poeta, las derramas sobre...