Ain Yalut (1260).
En 1258, las temibles huestes mongolas habían tomado Bagdad, Alepo y Damasco, y su siguiente objetivo era el Egipto mameluco. El sultán Qutuz opuso resistencia a la invasión con 20,000 de sus mejores hombres. Una inoportuna disputa dinástica menguó sustancialmente el tamaño del contingente mongol, de manera que en Ain Yalut se enfrentaron dos ejércitos numéricamente similares. Los mamelucos fingieron una falsa retirada y soportaron la demoledora carga mongola. Fueron las unidades de reserva las que tomaron por sorpresa a los mongoles, haciéndose con la victoria.