Argentina 1978. Una niña de 13 años
Argentina 1978. Ganan la ‘guerra’
El
‘Matador’ y el General ganan la ‘guerra’.
Mario Alberto Kempes fue la figura de la Albiceleste, que conquistó su primera Copa del Mundo al vencer a Holanda en la Final.
El futbol volvió a ser secuestrado por la política, que puso en peligro la realización de la Copa del Mundo de 1978 y es que Argentina, país sede, vivía momentos muy complicados por la dictadura del general Jorge Rafael Videla, lo que ocasionó que muchas selecciones dudaran en participar, e incluso hubo especulaciones sobre un boicot y un cambio de sede.
Argentina 1978. Fracaso absoluto
Falta de roce internacional, desunión, deficiencias tácticas y hasta envidias son tan sólo algunas del cúmulo de circunstancias que hace 44 años sentenciaron a México como el peor equipo en Argentina 1978.
Argentina 1978. Cábalas y Política
No sólo el invierno argentino entibió la efervescencia y el desbordamiento de pasiones multitudinarias que provocó la máxima justa del balompié mundial; el régimen impuesto dos años antes por Jorge Rafael Videla y los miles que desaparecieron súbitamente tras manifestar su inconformidad con el dictador sembraron la duda no sólo en el país sede, sino a nivel internacional, de qué tan prudente sería llevar a cabo el Mundial en medio de una situación tan delicada.
La recomendación del momento
Los Autogobiernos de los Micaeles
Existen siete grupos de Hijos Creadores autootorgadores y están así clasificados de acuerdo con el número de veces que se han otorgado a las...
Lo más popular de la semana
-
En esta entrega de los “queridísimos” trabalenguas, se da una lista de esos ejercitadores de la lengua que tienen a algún elemento de la...
-
La 1° cultura (al menos de la que se tiene un registro) en aparecer en Mesoamérica, y que es conocida como la "cultura madre", es ...
-
La organización lineal tiene sus orígenes en la organización militar de los ejércitos de la antigüedad y de la época medieval. El princi...
-
Por toda la casa se esparce un olor agridulce a membrillo, a orejones de calabacita y pera, a pasta de higo y a ejotes pasados por agua que,...
-
¡Qué lindo, vengan a ver qué lindo: en medio de la calle ha caído una estrella;