Mostrando las entradas con la etiqueta Quinto Grado Lecturas. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta Quinto Grado Lecturas. Mostrar todas las entradas

Margit Frenk Alatorre-El tren que camina al revés




¿Alguna vez has viajado de noche en un tren? Afuera está todo oscuro. Tú tienes sueño; empiezas a dormitar. De pronto sientes un sobresalto: ¡El tren está caminando para atrás! Está rodando, rodando rápidamente en dirección contraria a la que llevaba antes. ¡Está regresando a tu pueblo!

Juan León Mariscal-Ciempiés




Ciempiés,
¿No crees
que es
una grosería
tardarse tanto tiempo en la zapatería?

Juan León Mariscal-Jirafa




Jirafa,
yo no sé
cómo cupiste
en
el
Arca de Noé.



Fuente: SEP. Español. Quinto Grado. Lecturas (1972).



Agustín Yañez-Mi papalote




Se han soltado los vientos, madre, y es bueno que me fueras dando para comprar un papalote en figura de sol: grande y colorado, la armazón de carrizo y los tirantes de hilacho. No quiero, como otros años, comprar un papalotito de popotes, hecho con papel de china y los tirantes de engrudo, para no más ir corriendo por la calle, contra el viento, sin que se sostenga sólo con el aire, ni se atore en los alambres de la luz, ni con cualquier rabieta caiga al suelo y se rompa. Iré al campo, hasta el algodonal, o a las trojes… Si no quieres, madre, que vaya tan lejos, subiré a la azotea; verás qué bonito, sin necesidad de correr, el aire coge mi papalote; yo tendré que hacerme fuerte para que no me lleve; si colea, no será para caerse; verás que bonito irá subiendo, aprisa, casi arrancándome el hilo de las manos; en lo alto, madre, la figura del sol parecerá que se ríe, y yo tendré el gusto de sujetarla y moverla a mi antojo, como si moviera y sujetara, con un cordón, al sol de veras, títere de mis juegos.

Fernán Silva Valdés-La cometa




Empieza a hacer calorcito,
ya viene la primavera,
se fue el tiempo de los trompos
y llega el de las cometas.

Prometeo




Prometeo era hijo del titán Japeto y de la Tierra. Se le admitía en el Olimpo, la morada de los dioses, y tomaba parte en sus discusiones. Prometeo amaba a los hombres, que eran desgraciados, y hacía llegar sus peticiones a los dioses.

Maria del Carmen




Que comienzo y que comienzo,
yo no quisiera empezar,
porque el que comienza acaba,
y yo no quiero acabar.

Armida de la Vara-El País de las Cien Palabras




Erase una vez un país… no recuerdo bien su nombre, pero le llamaremos el “País de las Cien Palabras”. En ese país los hombres eran muy felices. Vivían en un pueblo ni grande ni pequeño, y todos se conocían. Si alguna vez se peleaban dos, los demás los separaban; si alguien se enfermaba, los vecinos lo cuidaban, le daban sus medicinas, barrían y sacudían; si uno tenía que salir de viaje, los amigos le ayudaban a acomodar las ropas en la maleta, lo despedían y cuando regresaba, iban a esperarlo para darle la bienvenida. En fin, todos se querían y se ayudaban.

Tran Dang Khoa-Consejos a Giang, mi hermana menor




Papá y mamá noche y día
están los dos trabajando.
Yo voy a clase, y tú, Giang,
te quedas solita en casa.
Hermanita, yo te pido
que no te alejes jugando
de la puerta.

Historia de los dos que soñaron




Cuentan unas crónicas muy antiguas, escritas por hombres sabios y amigos de la verdad, que hubo en El Cairo un hombre muy rico, tan generoso y caritativo que terminó por repartir entre los pobres toda su fortuna, quedándose solamente con la casa de sus padres. Como no guardó nada para sí, tuvo que empezar a trabajar para ganarse la vida.

Juan Ramón Jiménez – La Felicidad




¡Mira la amapola
por el verdeazul!

El ser más poderoso del mundo




Un mago de la India pasaba cierta hermosa tarde por la orilla del río Ganges, el gran río sagrado de los brahmanistas y budistas.

De repente oyó fuerte aleteo sobre su cabeza y, movido por la curiosidad, alzó la mirada y vio un búho que llevaba un ratoncito en el pico.

Jaime Torres Bodet-Naranjas




Naranjas que caían
al corral de mi casa
de una casa vecina,
rodando por las tapias…

Rafael Alberti-Pregón




¡Vendo nubes de colores:
las redondas, coloradas,
para endulzar los calores!

Juan José Arreola-La feria de Zapotlán




La feria de Zapotlán se hizo famosa por todo este rumbo. Como que no hay otra igual. Nadie se arrepiente cuando viene a pasar esos días con nosotros. Llegan de todas partes, de cerquita y de lejos, de San Sebastián y de Zapotiltic, de Pihuamo y desde Jilotlán de los Dolores. Da gusto ver al pueblo lleno de fuereños, que traen sombrero y cobijas de otro modo, guaraches que no se ven por aquí. Nomás al verles la traza se sabe si vienen de la sierra o de la costa. Muchos tienen que quedarse a dormir en los portales, en el atrio de la parroquia o en la plaza, junto a los puestos de la feria, porque no hay lugar para tanta gente. En todas las casas hay parientes de visita y duermen de a tres y de a cuatro en cada pieza. Los corrales se vacían de gallinas y guajolotes. Y no hay puerco gordo, ni chivo ni borrego que llegue vivo al día de la función.

Rafael Alberti-Bailecito de bodas




Por el totoral,
bailan las totoras
del ceremonial.

Astrid Lindgren-Pipa llega a su casita de campo




Había una vez en un pueblecito de Suecia un huerto hermoso, y en el fondo se alzaba una casita de campo. Era la casa de Pipa Mediaslargas.

Juana de Ibarbourou-Estío




Cantar del agua en el río,
cantar continuo y sonoro:
arriba bosque sombrío
y abajo arenas de oro.

Bernardino de Sahagún-Poema de Quetzalcóatl




Quetzalcóatl reinaba en Tula. Todo era dicha y abundancia, los víveres no se vendían por precio entonces.

Alejandro Casona-Luna y agua




La luna pesca en el charco
con sus anzuelos de plata.
El sapo canta en la yerba,
la rana sueña en el agua.

Y el mirlo afila su voz
y el pico contra las ramas.


Fuente: SEP. Español. Quinto Grado. Lecturas (1972).

La recomendación del momento

Distribución Poisson. Accidentes en planta (en Excel)

  @divinortv Distribución Poisson. Accidentes en planta (en Excel). En este extracto de vídeo se resuelve un problema de Distribuci...

Lo más popular de la semana