El mirlo se pone
su
levita negra,
y por los
faldones le asoman las patas
de color de cera.
El mirlo se pone
su
levita negra,
y por los
faldones le asoman las patas
de color de cera.
Doña Luz me regaló pan con miel.
- Prueba, qué bueno está – me dijo.
- Sí, me gusta mucho. ¿Hizo usted la miel con piloncillo?
Residen en el Paraíso numerosos grupos de seres magníficos, los Ciudadanos del Paraíso. Puesto que no se ocupan directamente del plan del pe...