Había una vez un mono listo que inventaba muchas cosas, en tanto que sus compañeros se dedicaban a imitar lo que él hacía.
Un día, el mono listo tenía mucha sed y sintió deseo de tomar agua de
coco.
Trepó a una palmera.
Había una vez un mono listo que inventaba muchas cosas, en tanto que sus compañeros se dedicaban a imitar lo que él hacía.
Un día, el mono listo tenía mucha sed y sintió deseo de tomar agua de
coco.
Trepó a una palmera.
Existen siete grupos de Hijos Creadores autootorgadores y están así clasificados de acuerdo con el número de veces que se han otorgado a las...