Este enfoque se basó en el registro de las operaciones por partida doble, el cual se conocía en el Renacimiento e incluso antes, pero a partir de Luca Pacioli tuvo una aceptación general.
El objetivo principal de este enfoque es registrar fácilmente y sin arreglos o modificaciones las transacciones realizadas por las empresas. Se parte de la naturaleza de las cuentas del activo, pasivo y capital, ingresos y gastos, así como de las utilidades o pérdidas, anotando en un par de columnas tanto los aumentos como las disminuciones de cada concepto involucrado en una transacción mercantil.