La elegancia de Le Roi.
Durante los años 80, Michel Platini fue la gran alternativa europea a la hegemonía del argentino Diego Armando Maradona en el fútbol mundial. Este centrocampista francés sorprendía por la clase que demostraba en cualquier acción, por su rechazo a lo vulgar y por su facultad de hacer fácil un deporte profesionalizado y con tantas presiones como el fútbol. Incluso la manera de situarse en el campo, de ordenar a sus compañeros, hizo que lo compararan con el mismo Napoleón. Uno fue mariscal en el campo de batalla, y el otro en el terreno de juego.